Capítulos ~

domingo, 1 de mayo de 2011

Capítulo 5. Un viaje decisivo. Primera parte.

No fue una gran conversación, ya que Ian volvió a gritarme, está preocupado por mi dijo Jason, no me parece posible, yo creo que quiere salvar su pellejo.
-No irás – dijo Ian tratando de serenarse, pero su intento duró poco.
-Claro que iré – dije, por primera vez, furiosa.
-Ian, Kath es capaz de cuidarse sola – intervino Jack.
-Bueno, lo dejaré pasar, pero si muere no me vengas a sermonear – dijo mirando a Jack – tengo todo, investiguemos.
-¿Qué debemos investigar, cómo matar a… Mortwell? – dije tras una vacilación, todavía no me sentía capaz de decirle, hermano.
-Eso, y cómo entraremos en el Reino Oscuro, no olvidemos que es peligroso – contestó Jason mirándome con preocupación.
-No quiero que pongan sus vidas en peligro por mí.- Chillé histéricamente.
-No es sólo por ti Kath, sino por el bien de todos, el podría matar a todas las personas existentes en la faz de la tierra, tan fácilmente que sucederá en un visto y no visto.
Me aterré ante esa idea, ¿Sería de verdad como un visto y no visto?
- Si requiere una vida, me quedaré – dije con la voz ahogada.
- Ni hablar, descarta esa idea – se horrorizó Jason. Jack yo apoyó asintiendo enérgicamente con la cabeza.
- Siempre tan terco – murmuré, Jason me dedicó una hermosa sonrisa.
- Acostúmbrate – dijo manteniendo la hermosa sonrisa en su rostro. Lo miré, para mi sorpresa, con preocupación. Pensar que podía morir en aquel viaje era… horrible, la idea me espantaba. Ver a esa sonrisa morir. Caer, y llevarse con ella a Jason, en una infinita oscuridad, era la peor de las imaginaciones.
- Ehh, Katherine, ¿escuchaste el plan? – preguntó Ian irritado ante mi falta de atención.
- Hum... ¿Cuál plan? – pregunté avergonzada.
- El plan de cómo entraremos al Reino Oscuro- respondió Jack.
-Repítanlo, por favor – dije algo incómoda.
-Primero que nada, tendremos que adentrarnos en El Bosque de las Miserias, jamás nadie ha salido de ahí con vida. Luego, tendremos que entrar en La Dimensión Oscura, y por último, y el más difícil de todos los retos, entrar en el Reino Oscuro. Y pasar desapercibido – lo dijo firmemente, pero en algunos momentos noté que a Ian le temblaba levemente la voz.
- ¿No será un tanto difícil entrar en el Reino Oscuro burlando al mayor hechicero? – pregunté con sarcasmo.
- Para nuestra suerte – repuso Ian – tenemos a una Veekla de nuestro lado.
- Cuidado con lo que haces, Ian- advirtió Jason.
Pero Ian, descartó su comentario con un ademán.
- Tiene razón. Tienen a una Veekla de su lado- argumenté yo. – Y la usarán para lo que necesiten.
- Por supuesto que no. Eres una persona, no una cosa – La firmeza era lo único que podía escuchar en la voz de mi amigo, y quizá ahora era incluso algo más…
- Claro que no Katherine – asintió Jack-. Eres alguien, no algo.
- De acuerdo, de acuerdo. Ya entendí...- Murmuré furiosa.
- No estoy pidiendo que se sacrifiqué – nos interrumpió Ian- sólo estoy diciendo que si aprende a controlar sus poderes podrá…
- Podré matar a Mortwell- le corté. Era una idea fantástica. Ian y yo nos miramos con complicidad.
- No es mala idea – argumentó Jack, mirándonos sorprendido, como si fuera una sorpresa que Ian hubiera propuesto algo inteligente.
- No – murmuró Jason, los tres lo miramos con cara extrañada, era una idea perfectamente realista.- ¿Qué pasa con ella, Ian? ¿Qué pasará si pierde? Nosotros sabemos el ejército que Mortwell lidera en el Reino Oscuro.
- ¡Por Dios, Jason! Katherine no luchará sola, los licántropos la ayudaremos- Exclamó Jack.
- Sí, pero ¿Dónde están los licántropos?
- Hospedados en el Reino de la Luz – Le respondió Jack a Jason.
- Eso significa otra parada – comentó Ian, que estaba tan aburrido, que parecía estar en las clases de la profesora Lidia, era odiosa en las clases de secundaria.
- Por supuesto, no es mala idea – dijo Jason – Y no hay sólo licántropos. Hay hechiceros, vampiros, Macktalless.
- ¿Qué son los Macktalless? – Le corté curiosamente. Jack respondió a mi pregunta.
- El Macktalle es un ejército, y el Macktall superior es el jefe de todos los ejércitos de La Luz, en todo el mundo, y por lo que dicen es la criatura no humana más hermosa en todo el mundo – Jack me echó una mirada como diciendo “Yo lo puedo discrepar”. Y los Macktalless son guerreros de ése ejército, formado por hombres y mujeres, son criaturas hermosas, ya qué, no son humanos. Pero los verás y quedarás maravillada – Jack si que idolatraba a los Macktalless, pero esa mirada me había dejado en la duda.
- Muy bien, muy bien – lo interrumpió Ian - ¿Terminaron las lecciones, lobo?
- No lo trates así, Ian – repliqué furiosa
- Está bien, Katherine – murmuró Jack- este vampiro es tan estúpido que no se puede controlar…
Pero no pudo terminar la frase porque Ian, furioso, se levantó del sillón, levantó a Jack en el aire y lo tiró contra la pared del otro extremo. Corrí rápidamente junto a Jack, tenía un corte en el rostro, pero por lo demás, ileso.
Me giré y miré a Ian con desprecio.
- Maldita sea, Ian. ¿Cuál es tu problema?
- Odio que me insulten.
- Gánate el respeto que necesitas – grité enojadísima.
Pero en vez de seguir con la pelea me apacigüé, algo me decía que no me enojara con Ian.
- Tranquilos – murmuró Jason, atendiendo a Jack.
- Exacto, Ian. Tranquilízate- murmuré con malicia.
- Lo mismo digo, Katherine- nos miramos un largo rato, desafiantes.
- Pueden parar – explotó Jack- No importa si se tienen que tranquilizar o no, sólo perdónense.
Me quedé pensando con cuanta normalidad lo dijo, yo no le podría pedir perdón a Ian así como así, me costaría mucho. Y sospechaba que a él le costaría también.
- Lo siento, Ian – murmuré a regañadientes.
- Disculpas aceptadas- y satisfecho fue a sentarse en los sillones.
- Eres un estúpido, Ian- gritó Jack, haciendo un esfuerzo para levantarse, y encarar a Ian. Pero, al ver que era imposible levantarse, por su pierna herida. Gritó desde el lugar- Pídele disculpas a Katherine.
- Lo siento- susurró, visiblemente frustrado y furioso por la orden de Jack.
- Bueno, no era lo que yo esperaba – intervino Jack- Pero la verdad… La verdad, no fue una disculpa sincera – descubrió Jack- Lo observo en tus ojos, mentiste respecto a esa disculpa.
Me fijé en cuan observador era Jack. Porque, claro está, Ian no había dejado traslucir ninguna emoción. O al menos no una válida, tal vez vi un destello de cuanto le costaba, pero no más que eso. Pero luego, dando un respingo, caí en la cuenta que Jack era un licántropo. Lo cuál me extrañó, pero no el que Jack sea licántropo, a eso le dedicaba una sonrisa, ver que Jack y yo estábamos adaptados al mismo mundo me hacía sonreír. Lo que me extrañaba, era que él, un licántropo, pudiera ver las emociones de Ian. Y yo, una Veekla, el término usado por las personas para denominar a una hechicera vampira, no había podido visualizar nada. Era realmente extraño, pero la voz de Jason me sacó de mis pensamientos, devolviéndome a la realidad.
- No es tan grave, pero tiene un dolor agudo, por lo que he notado, en la pierna izquierda.
- ¿Estará bien?- mi voz sonó un tanto desesperada, y podía imaginar que lo único que traslucían mis ojos era desesperación y temor.
- Claro, los licántropos se curan rápido- Pero no contestó Jason, sino Jack, dedicándome una cálida sonrisa, que parecía que sólo la tenía para mí. Le sonreí también. Su apoyo no me venía nada mal.
- Sigamos.
La indiferencia de Ian me impactó. Había herido a Jack en la pierna. Pero él no tenía un ápice de arrepentimiento.
El olor a humo fue lo primero que detecté. La casa estaba completamente en llamas. Inmediatamente corrí hasta la salida.
Me sorprendió mi rapidez y mi destreza al correr. Atravesé por fin la puerta, y el aroma a aire fresco golpeó contra mi cara.
Sólo dos personas había allí afuera. Ian y Jack. Pero… ¿Dónde estaba Jason?
Ian me miró, y como si me hubiera leído el pensamiento dijo,
-Tendremos que seguir sin él, Katherine. Y tendremos el viaje ahora.
Lo miré, verdaderamente como si estuviera loco.
-No, no iremos sin Jason- mi interior estaba confuso. Una parte de mí exclamaba “Vete con Ian, él es hermoso y fiero. Lárgate con él. Y deja a Jason de una maldita vez” Pero la otra, y para mí la más sensata decía “Ian sólo te está engañando, sólo eres su juguete. Busca a Jason y vete con él. Con Jason tendrás una buena vida”
Mi parte desesperada por Ian tenía razón, él era hermoso y fiero. Eso nadie lo podría negar. Pero mi amor por Jason era… indescriptible. Lo amaba, y sin duda era mi vida.
-Nos vamos- dijo Ian indiferente, y caminó rápidamente hacia el bosque.
-¡Ian!- grité, ese chico era impredecible.
Ian se volteó y me miró, con aburrimiento.
-¿Qué pasa, te entraron ganas locas de dormir en la intemperie?- preguntó burlón. Sus ojos negros destellaban en una maléfica diversión.
-Ian, para. Jack está herido, no puede caminar, y yo no creo que pueda seguir tu paso.
Ian, por primera vez se fijó en Jack, sonrió divertido. Lo miré, verdaderamente furiosa, Jack estaba mal, e Ian reía. Pero se puso serio de repente.
-Jack ya está curado, Katherine. Mira- miré, era cierto. Jack estaba de pie. Y me miraba radiante.
-Vamos, ¿qué esperamos?
Ian, satisfecho con que podía seguir sin interrupciones se encaminó hacia el bosque.
Cuando estábamos en el corazón del bosque se escuchó el grito de una mujer. Corrí hacia el sonido, y Jack también lo hizo, pero Ian nos ganó a los dos. Y ya estaba mirando el cuerpo de la mujer. La miró con desprecio.
-Una sucia hechicera.
Se apartó, a la vez que Jack se acercaba, la vida reapareció en su rostro,
-No está muerta, vive.
La mujer era bonita, tenía ropajes blancos, era bronceada, cabello castaño y ojos negros.
-Pertenece al Reino de la Luz- dijo Ian.
Lo miré, sorprendida. Ian me miró y señaló su ropaje. Claro, era blanco.
Jack la cargó en vilo y seguimos nuestro camino.
De la muchacha venían gemidos.
-¿Qué pasa?- preguntó, sobresaltándonos a todos.
-Nos preguntábamos lo mismo- señaló Ian-. ¿Qué hacías en el corazón del bosque?
-¿Por qué- propuso Jack con dulzura- no nos cuentas lo que sucedió?
-Claro,- dijo la muchacha- Me llamo Walkiria, tengo dieciocho años. Mi familia es una de las más importantes del Reino de la Luz. Al parecer es por eso el Rey Oscuro me quiso raptar. Pero no lo hizo, creo que porque se acercaron ustedes. Es la primera vez que veo a Mortwell en una figura corpórea. Esta fue la primera vez que salgo del Reino de la Luz.
-¿Puedes andar?- le preguntó bruscamente Ian. La chica, Walkiria lo miró sorprendida por su falta de tacto.
-Claro, claro que puedo. Licántropo, suéltame.
Miré a Walkiria con reproche, Jack la ayudaba a andar y lo trataba como su sirviente. La muchacha me devolvió la mirada, y me miró por primera vez.
-Vaya, Vaya. Una Veekla, hay muchos como tú en el Reino de la Luz. Pero no me paro a pensar en… ellos- dijo con maléfica diversión, e Ian no pudo contener su lado contestón e intervino,
-Muchacha, no se quien te crees que eres, pero esa Veekla, tiene más poderes que tú.
Walkiria lo miró, pasando la vista sobre él, como si fuera invisible, Y él, echo una furia la agarró por la muñeca, y la chica gritó de dolor, de la punta de los dedos de Walkiria salían chispas de colores,
-¡Suéltame! ¡Por favor, suéltame! – se retorció, y quedó de rodillas, manchando así su vestido de seda blanco.
-¿Y tus poderes, bruja? – Le espetó Ian mirando con diversión las débiles chispas de colores.
-Acaba de atacarme Mortwell, es obvio que se llevaría un tanto de mis poderes- dijo desesperada, pero con malicia- Rayos, vampiro. ¡Mis padres te matarán!
Ian sonrió burlón, sus ojos tenían destellos rojos. Y al parecer, estaba hambriento. Sus palabras confirmaron mis pensamientos.
-Walkiria, estoy muy hambriento. ¿Quieres que compruebe si eres de sangre noble?
-¡No me toques, vampiro!- espetó asustada y furiosa-. ¡Suéltame, desgraciado!
A todo esto, intervino Jack,
-Ian, estás siendo estúpido. Si la matas tendremos pocas oportunidades de llegar rápido al Reino de la Luz.
Sus miradas se cruzaron, por primera vez. Y me pareció ver rendimiento en los ojos de Ian.
Jamás admitiría que Jason tenía razón, pero la agarro a Walkiria del brazo y se encaminó a lo que sería un costoso y largo viaje.
Pero, antes de eso le dedicó unas palabras a la hechicera.
-Nos llevarás al Reino de la Luz con tus poderes, bruja.
Walkiria lo miró como si fuera realmente estúpido,
-No tengo poderes, no ahora.
Ian la miró, con aire superior.
-Bueno bruja, entonces, nos guiarás. Y si no nos eres de ayuda, no me vendría mal un bocado por el camino.
Ian rió secamente y la tomó de la muñeca, para que se adapte a su paso.
Tomé la mano de Jack. Walkiria posó la vista en nuestras manos, y con un repentino giro de dedos me provocó un dolor, en el que, me ahogaba poco a poco. De mi emergía poder, lo sentía. Pero lo único que cortaría el dolor sería una cosa, separar nuestras manos. Muy a mi pesar, las desenlacé y eso me provocó un dolor todavía más agudo. Pero la sensación desapareció al instante. Miré a Walkiria con odio, y ella me sonrió con malicia. Jason miró nuestras manos, separadas. Y sentí como la alegría emergida pronto se desvanecía.

11 comentarios:

  1. Creo que tengo una gran duda... Cuando la casa se quema y Katherine sale del incendio Jason no está, ¿verdad? Pero al final vuelve a aparecer... ¿cuándo ha vuelto? Me encantaría que se me pudiera responder a esto. :D

    ResponderEliminar
  2. Nunca vuelve...No hasta ahora...Bueeno, me gustaría que me digan...¿Quieren que siga escribiendo?

    ResponderEliminar
  3. Por supuesto! La historia está genial ;)

    ResponderEliminar
  4. Chica!!
    Das pena, está bien que escribas un libro, sólo que me parece patético que te bases en L.J. Smith.. Un buen escritor es aquél que escribe cosas originales sin copiarle a los demás.. Cuando hagas eso, cuando dejes de copiar a los otros, serás una buena escritora..

    Sólo es un consejo..

    Tú sabrás si lo tomas o lo dejas!!


    Pd. Se escribe VAYAS, VAYA, no VALLAS, VALLAS

    ResponderEliminar
  5. no hagas caso de lo que te digan. no hace falta que pidas consejo de si les gusta o no tu libro, o si deves seguir escribiendo, porque si te gusta escribir y te sientes bien eso es lo mas importante. Te doy un consejo si me permites: sigue a tu corazon porque al fin cabo es lo cuenta, siente, sueña porque la verdad te sentiras bien y te ayudara a escribir.
    si alguna vez necesitas hablar dimelo y te ire mi messeger.
    un saludo

    ResponderEliminar
  6. Por supuesto anónimo, estoy de acuerdo contigo! Nadie de aquí es escritor profesional así que lo que más cuenta es la intención. Y respondiedo a Meniiita digo que es cierto, un buen escritor debe ser original, pero todos los grandes autores siempre dicen: "no canvies tú historia porque guarde parecido con otras, solo conseguirás canviarte a ti" Así que, no te preocupes por eso :)

    ResponderEliminar
  7. AHHH PS IO ESTOY DE ACUERDO CON LA CHICA, NO PUEDE SER Q DE VERDAD COPIES LAS COSAS Y NO TENGAS IMAGINACIÓN, ESO DA PENA ES UN ROBO!!!!! Q MAL Q NO TENGAS CREATIVIDAD, INETNTA CON LOS CHISTES, TAL VEZ SALGA MEJOR ;)

    ResponderEliminar
  8. mmmm... vaya, creo que aqui nadie se pondrá de acuerdo :S lo mejor es que cada uno haga lo que quiera, si le gusta la historia pues que la lea y si no le gusta pues que no lo haga. De todos modos pienso que si has publicado una historia es porque te gusta escribir asi que si tienes alguien que te la lea pues deberías seguir :)

    ResponderEliminar
  9. Blah Blah Blah!!!

    Si quieres puedo seguir con tu historia xD
    jajaja sólo tengo que ir a copiar y pegar fragmentos de los libros The vampire diaries ¿verdad?, jajaja, que patética eres Emilia!!!..

    Respondiendo a uno de los anónimos..
    Su forma de escribir no es parecida, ES LA MISMA ¿ok?... Su argumento es el mismo.. TODO ES LO MISMO..

    Ésta chica puede ser demandada por plagio, ¿Lo sabías?..

    Espero que los dueños de los derechos de The vampire diaries nunca lean éste blog, porque Emilia estarás en serios problemas!!..

    Si yo fuera tú, borraba este blog.. Porque está claro que no tienes registrada "tu obra", de lo contrario ya sabrías que has cometido plagio!!

    Saludos!!!

    ResponderEliminar
  10. Emilia sos una ZORRA BARATA!!!

    ResponderEliminar